ADICCIÓN CATÓDICA: BLADE




Título: Blade The Series
Año: 2006
Creador: David S. Goyer (serie), Marv Wolfman y Gene Colan (personaje)
Temporadas: 1. Cancelada en el capítulo 13.
Reparto: Sticky Fingaz, Jill Wagner, Jessica Gower, Neil Jackson, Nelson Lee, Larry Poindexter, Emily Hirst, Don Thompson, Bill Mudly.

En los últimos años Marvel y DC han llevado una pelea en el cine para ver quien adaptada más y mejor a sus personajes, si bien Marvel gana tanto en cantidad, como en taquilla y me atrevo a decir que en calidad (aunque sólo sea por los X-Men de Singer y los Spider-Man de Raimi). En la pequeña pantalla es DC quien reina desde hace años con la exitosa Smallville (aunque la de Aquaman se quedó en un capítulo y Birds of Prey fue cancelada a media temporada como Blade).

Marvel puso toda la carne en el asador y contrató para realizar la serie a David Goyer que había escrito varios guiones fílmicos e incluso dirigido la última aventura del caminante diurno: Blade Trinity. Y con el reputado guionista de tebeos Geoff Johns. Y lo cierto es que la serie hace las veces de continuación directa de la trilogía y su factura visual muy similar a la que se vio en la gran pantalla.

Esta producción de Spike TV (modesta cadena yanqui para la que el piloto de Blade supuso su mayor éxito de audiencia) contó con el rapero Sticky Fingaz (The Shield) para encarnar a Blade, siendo su mayor diferencia con Wesley Snipes que en vez de lucir pelo corto éste iba con el melón rapado. Pero el resto era igual, su abrigo negro, su katana, sus dardos de plata, la pistola, el coche, la moto. Pero está claro que el bueno de Sticky no es Mr. Snipes, y el punto más flojo (pero flojo, flojo) es la parte de la acción (que en una serie de éstas características debería ser lo principal) y las peleas son realmente malas, se nota demasiado cuando hay extras, los golpes que suelta Blade nunca se ve donde acaban o si lo hacen es con el efecto “muelle” que tan de moda se puso con series como Hércules o Xena.

Pero no todo es malo, hablemos un poco de lo que pretendía contarnos la serie. En sus aventuras televisivas Blade está en guerra contra las doce grandes casas vampiricas, en especial con la Casa de Catón dirigida por Markus Van Sciver (Neil Jackson. Alexander, Stargate SG-1). Un vampiro impuro que está desarrollando un suero que o bien podría ser la poción para dotar a todos los Hominis Nocturnae con los poderes de Blade o bien ser la destrucción para los vampiros pura sangre (existe una guerra interna entre los dos tipos).


Para ello Blade contará con la ayuda de Shen (Nelson Lee, Ley y Orden) un joven oriental que hace las veces del cinematográfico Whistler, fabricando armas, proveyendo de suero y siendo el único amigo de Blade. Y también con la ayuda de Krista Starr (Jill Wagner, Stargate Atlantis, Monk) una ex – marine que tras buscar a su hermano se ve envuelta en un incidente con vampiros y es transformada por éstos. Blade la ayudará y evitará que se vuelva malvada. ¿A qué todo esto os recuerda demasiado a la primera parte de la trilogía?.


A mi lo que más me ha gustado han sido las pinceladas y detalles que se nos han dado del pasado de Blade. Hay numerosos flashbacks de cuando era niño y la sed de sangre empezaba a hacer mella en él, seremos testigos de la primera aparición de Whistler y del origen de su cojera. Y lo más interesante, los tatuajes que luce Blade (idénticos a la película) de cuando formó parte de una banda llamada los “Mala Sangre”.

1 comentario:

Anónimo dijo...

La serie estaba bastante bien, y resultaba entretenida. Yo vi la temporada completa, y puedo decir que me dejó con ganas de más.

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