Reseñas ABRIL presents: Lobezno #27

Aquí tenemos otro número más del Lobezno de Rucka y la continuación de "El Paso del Coyote", la saga que nos ocupa.

Si en algo se caracteriza el guionista, es en saber profundizar de forma excelente en los personajes, sabe como sacarles partido y jugar con la psiquis de éstos, haciéndolos complejos y tridimensionales, lo cual da gusto. Lo pudimos comprobar en Elektra, donde realizó todo un análisis del carácter de la protagonista y su forma de vida, permitiéndole evolucionar y cambiar sus costumbres solo para ver, finalmente, que no podía cambiar, que era una asesina y siempre lo sería. Realizó una etapa fantástica que solo se truncó por los dibujantes asignados y, por el mismo problema que está teniendo en esta serie, esa exagerada lentitud.
Y es que Rucka es lento, verdaderamente lento, cada cómic suyo se tarda de leer cinco minutos, en un soplo te lo has ventilado, porque además suele ser parco con sus, por otra parte, excelentes diálogos. Aun así, no creo que sea por culpa del guionista, ya he repetido cientos de veces que esta "costumbre" es general en casi todos los títulos de Marvel en la actualidad. Además, en DC está realizando una excelente labor en Gotham Central y Batman, y en ambas series no es nada lento.

Sobre la saga que nos ocupa, cabe decir que es una crítica contra la inmigración ilegal en los USA, que es cosa de la mafia de los países latinoamericanos, Rucka quiere tratar este tema y lo hace con el enano canadiense.
Lobezno, por otra parte, se ha pasado tres números tratando de buscar a Rojas, la cual ya ha encontrado y ha resultado ser toda una sorpresa de cuidado, pues se trata de una mujer embarazada, lo que da bastantes problemas a Lobezno en este número.
Lo más destacable es, sin duda, la conversación entre Rojas y Logan, pues vemos que Rucka tiene más que pillado al personaje, le ha cogido el tranquillo como ningún otro lo ha hecho, ya que Rojas desafía a Lobezno abiertamente, diciéndole que lo único que busca es una razón para matar, por eso se mete él solo en esos problemas. Es, verdaderamente, un buen apuro para el protagonista, que no se ve capaz de matar al niño inocente que hay dentro de esa horrible mujer. Lo que no te ves venir es el desenlace de este número, secuestrando al crío recién nacido para llegar a un acuerdo. Genial.
No puedo acabar la reseña sin hablar de la teniente Cassie, una secundaria creada por Rucka. Si Claremont realiza a sus mujeres terribles, con tanto carácter y tanta personalidad, este guionista no se queda corto, pues suele trabajar en sus colecciones con personajes de este estilo, como la secundaria que nos ocupa y que parece estar enamorada del canadiense, veremos cómo acaba esta extraña relación.

Leandro Fernández, por otra parte, es un dibujante muy interesante. Si bien se echa de menos a Robertson (al menos yo), la espera se hace mucho más corta gracias a este narrador impecable, con un estilo reconocible y su uso (no muy bueno) de las sombras. Tiene muy buena composición de página y sabe perfectamente cómo enfocar las escenas, da gusto. A pesar de todo esto, tiene pequeños fallos que pulir, pues hay expresiones que no les sale del todo bien y abusa de los negros. Aun así, es un buen dibujante.

Pues eso, una saga bastante buena y bien planteada, lástima de su lentitud. Estoy seguro de que, leída seguida, tiene que ser muchísimo mejor. 7/10.