
Y no es por nada, pero estamos ante uno de los casos más exagerados de continuidad abolida que se haya podido ver en un cómic de Marvel.
Se trata de los primeros seis números de la nueva serie regular de Pantera Negra, guionizada por un escritor que viene de la televisión, Reginald Hudlin y dibujada por un veterano, uno de los mejores dibujantes del medio, John Romita Jr.
La primera saga, recogida en este tomo, sirve de presentación de una manera bastante adecuada, de hecho, nos cuenta el origen de Pantera Negra desde el principio, nos presenta Wakanda, nos explica el por qué de su progreso, su sistema, todo aquello que tiene que ver sobre el dios Pantera, las responsabilidades del rey, su posición en el mundo y hasta en qué consiste ese extraño material llamado Vibranium.

Vamos, que la saga no se queda corta, tiene un buen ritmo (aunque habría que discutir si la culpa la tiene el dibujante, uno de los mejores narradores que hay) y la gran batalla está muy, pero que muy bien.

Maldita sea, puedes equivocarte en una escena o dos, puede que no sea para tanto el que cambies de nacionalidad a un personaje o algún detalle del pasado del protagonista, pero es que esto es demasiado.
Hablo de la manera en que T`Challa llega al trono, esa hermana nunca vista, la madre viva, esa nueva idea del Vibranium (no, nunca ha absorbido vibraciones como explican aquí), ese Klaw completamente nuevo (¿pero su poder no deribaba del sonido?), ese Caballero Negro (¿fanático religioso?), ese extraño Hombre Radiactivo que se le supone en los Thunderbolts (como bien veremos en Enero)... Y un laaaaaaaargo etc.
Aparte del hecho de que resulta confuso distinguir el pasado con el presente, pero es un mal menor, solo hay que prestar un poco de atención.


En definitiva, estamos ante un buen tomo, de notable, pero que pierde muchísimo si tratas de colocarlo en el contexto donde debería estar. Yo es que lo veo como una especie de Ultimate y eso es un fallo gordo, aún así, me ha enganchado al personaje, que antes apenas me interesaba y eso me parece mucho decir. 6/10.
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