+Q MANGA

El dilema Katsura

Que Masakazu Katsura es uno de los dibujantes más destacados del panorama nipón no es ningún secreto. Negarlo es dejarse llevar por la poca empatía que pueden ejercer sus historias de amor adolescente en los lectores. Yo soy uno de los muchos que, ya hace años, leyó Video Girl Ai cuando Norma se animó a sacarla en nuestro país (en aquel formato con papel que se autodestruía tras la primera lectura…), y la verdad es que la disfruté muchísimo. Sigo creyendo que es su mejor obra, se alarga un pelín demasiado, pero para el público al que iba dirigida (hablo de adolescentes) la historia de Yota, Ai & Cía. era una delicia.
Zetman no está mal, es entretenida, pero a veces uno se regodea imaginando cómo sería un manga dibujado por Katsura, con el apoyo de un buen guionista. Supongo que Katsura ni ha pensado en la posibilidad, pues digamos que sus obras no se venden precisamente mal, y es probable que eso de asumir el bajón en los guiones de sus historias no sea plato de buen gusto. Pero en fin, como aficionado a los mangas estoy en mi derecho de soñar cosas imposibles


Mechas al poder

El género mecha (ese donde jóvenes en edad de tener acné pilotan robots descomunales) es un clásico del anime japonés. Pero fue la serie Gundam la que puso sobre la palestra el término real robots, en el que teóricamente los mechas siguen las leyes de la física y demás. Veinte años lleva la saga Gundam dando series de calidad (y algunas excelentes, como Z-Gundam o su secuela Char’s Counterattack). Entender el alcance del fenómeno Gundam sin tener en cuenta la ingente cantidad de merchandising que genera es imposible: lo más destacado, las maquetas que muchos japoneses coleccionan compulsivamente; incluso en nuestro país muchos nos pasamos alguna que otra tarde puliendo piezas y pintando los mechas de nuestros héroes predilectos. Suelto éste rollazo porque ya están emitiendo en Japón la nueva serie de Gundam (Gundam 00), y hay mucho criticón suelto por estos lares cibernéticos, que rajan sin haber visto más que algunos fotogramas de la serie. Dicho esto, me permito copiar directamente de mi blog personal (Mángasis) un artículo que no hace mucho publiqué, espero que os guste:

Que los personajes de Gundam 00 hayan sido diseñados por los dibujantes de Loveless no significa que el efecto fanservice haya mancillado las inhóspitos parajes del shonen de mechas más masculino y despiadado, ni que las series no-shojo con algo de sensibilidad sean ya un pseudo-producto ideado para vender más. Personalmente, las historias violentas sin un mínimo de “humanidad” detrás me la sudan bastante, me llaman más la atención los héroes retorcidos como Light (Death Note) o las series como Elfen Lied (dónde a pesar de los litros de sangre, lo que más destaca al final es la búsqueda del perdón de Lucy). Una cosa es quejarse de que, justo cuando vamos por la parte más densa y crítica de un anime, nos metan un capítulo enseñándonos a los protas vestidos de osito de peluche o de visita al karaoke… otra es añorar los tiempos en que los animes eran productos superficiales y hechos para un público muy específico.He visto muchos animes, y de muchos ni me acuerdo. Los que dejan una huella más honda son aquellos cuyos protagonistas están vivos y te transmiten algo que tú reconoces, algún sentimiento con el que te identificas y te hace apreciar (u odiar) al personaje en cuestión. Escribo éste post porque estoy entusiasmado con la próxima serie de Gundam, y visitando foros sobre el tema me he percatado de qué lleno de prejuicios está este mundillo. “Gundam Seed es una historia para niñas, los protas son unos llorones. El mejor era Amuro, ese mataba y se quedaba tan contento”. Cosas así las he leído (y más a menudo de lo que me gustaría). Que guste o no una serie no es criticable, cada cual allá con sus gustos, pero al menos si se desprecia algo de manera tan descarada, cuanto menos habría que darse un argumento un poco más “inteligente”. Lo mismo aplico para la gente que ya se pone a despotricar contra Gundam 00 solo porque el diseño de personajes corre a cargo de la gente de Loveless.En fin. Estamos en el año 2007, ya va siendo hora de quitarse los clichés y las máscaras de “machos ibéricos”, y valorar las cosas en su justa medida


No hay comentarios:

  ©Layout por Presidente Blog.

TOPO