Reseñas JULIO presents: X-Statix #04

Título: La Cura.
Guionista: Peter Milligan.
Dibujo: Mike Allred y Nick Dragotta.

Al fin acabó la polémica saga de Lady Di. Y es que por mucho que se tratara de enmascarar cambiando detalles como el que sea una estrella pop y responda por el nombre de Henrietta, hasta el menos avispado sería capaz de reconocer a la princesa de Inglaterra en estas páginas, y sobre todo la crítica mordaz que Milligan realiza.

Lo más provocador es, sin duda, el mal lugar en que deja a los dirigentes de la Casa Real de Inglaterra, pues llega a ponerlos de excéntricos para arriba y se atreve a ponerlos como asesinos directos de la famosa princesa. Seguro que a ellos no les habría hecho muchísima gracia el que fueran retratados de esa manera, y mucho menos con indirectas tales como que tienen relaciones homosexuales entre sí. No digo que considere esto como algo insultante, sino que dudo que a ellos les hiciera gracia, que conste. Si es que al final entiendes el por qué de toda esta censura, es que el guionista no se corta un pelo y los destroza como quiere.

Pero dejando de lado el tema de Lady Di (cuyo final es una parodia muy adecuada de cierta película japonesa que ha tenido remake en nuestros lares, además de una segunda parte), también hay un hueco para el mismísimo Saddam Hussein, donde se insinúa que obtuvo las armas de destrucción masiva gracias a las multinacionales americanas. Y por si eso fuera poco, aunque no se vea quién es el que estaba bajo la máscara de Mr. Código de Barras (una "sutil" manera de dar a entender lo absurdos que llegan a ser los villanos con la elección de sus trajes y nombres código, además de una alusión al fascismo, donde todos resultan ser un producto en serie que solo se diferencian por el nombre) yo me atrevo a decir que se trata de cierta persona que está relacionada de una manera muy directa a la Guerra de Irak y que es totalmente americana hasta la muerte, más que nada por los comentarios que realiza sobre la América desprovista de acción y cierta viñeta bastante sospechosa donde se ve la Casa Blanca. Igual me equivoco, algo muy probable, pero no me extrañaría nada que se tratara de él.

Por otro lado, cabe destacar otros tantos detalles como esa visión consumista de la muerte, el que los medios de comunicación mientan como bellacos solo para obtener más audiencia... En definitiva, no añado más, Milligan deja toda la carne en el asador y se atreve a todo, esta saga de Henrietta no deja títere con cabeza.

En cuanto a la trama en sí, resulta muy amena y es muy difícil saber qué es lo que vendrá a continuación, hay muchas muertes inesperadas, además de un giro final tan extraño como divertido. Vamos, que suceden muchas cosas que no se ven venir.
Eso sí, si hay que decir algo negativo, me quedo con ese extraño comportamiento de Lacuna hacia Mr. Sensible, creo que es algo que está insertado de cualquier manera y solo sirve para conducir la trama. Es repentino y no resulta muy creible.
Por suerte, los personajes no están desdibujados, no al menos como me había parecido en los primeros números de la saga (que están en el tomo anterior editado por Panini), hasta parece que Mr. Sensible vuelva a ser el mismo de siempre.

Pues eso, una saga que no está nada mal y cuya censura no esconde lo que verdaderamente pretendía decirnos Milligan. Todo un juego bien realizado, muy divertido.

En el mismo tomo, tenemos también los dos números que forman otra saga, la que da nombre al tomo editado por Panini: La Cura. Esta saga pretende ofrecer algo verdaderamente novedoso, según el artículo de Julián Clemente, parece ser que quiere dar un giro radical a la situación mutante y hacer ver que las cosas han cambiado mucho, que ahora ser normal no es algo muy deseable y ser mutante es lo mejor.
¿Eso... es novedoso? Pues no.
No, porque hasta la misma Pícara ha pasado por esa misma situación, la de descubrir que ser normal no es tan maravilloso como parecía. Se ha llegado a ver hasta en la serie de televisión de X-men, la clásica de los años 90, cuando la saga que presentaba a Apocalipsis, que prometía la cura de la mutación para la mutante sureña.
¿Entonces? Lo que sí es muy diferente es el nuevo enfoque, no es que Myles tenga que aceptar su "maldición", sino que ninguno de los de su alrededor, después de extirpar su mutación, le acepta. Es como si ser mutante fuera lo mejor y no al revés. Eso sí que es novedoso, nunca se había tratado de esa manera este tema salvo en la etapa de New X-men con Morrison. Diablos, si hasta se hace alusiones a la homosexualidad. Si te quitas de ser mutante, ¿por qué no te haces hetero también? Lo que hace Milligan es destrozar los términos de lo políticamente correcto, de aquello que es considerado "normal".

Además, el tema está muy bien escrito, realmente está contado de otra manera y es de agradecer la profundización de un personaje que parecía tan perdido como Vivisector, el cual resulta muy interesante, tanto que se ha convertido en uno de mis favoritos en esta colección.

Mike Allred sigue como siempre, da una estética y estilo propios a esta colección y encima mejora número a número. ¿En qué mejora? Pues en la naturalidad apabullante de los personajes, se mueven con una soltura impresionante, parecen reales y encima son muy expresivos, el dibujante cuenta con una amplia gama de expresiones que no hacen más que acentuar las sensaciones y los momentos, es excelente en ese aspecto. Sin embargo, hay que reconocer que cada vez pone menos detalle en las páginas, de no ser por el excelente coloreado de Laura y Han Allred... Aún así, sigue siendo un estilo Pop muy adecuado para la serie, la cual no puedo imaginar de otra manera.

Solo hay que notar su ausencia en el último número del tomo, es bastante notable y por tan bueno que pueda ser Nick Dragotta, el no encontrarse con el estilo de Allred se hace extraño y hasta un poco molesto. Mucho más si es el segundo número de una saga que consta de dos, ya podrían haberle dejado los dos números, se notaría menos la ausencia del dibujante.
Obviando este hecho, Nick (que es un completo desconocido para mí) no realiza un mal trabajo, de hecho es bastante expresivo y también cuenta con un estilo propio bastante curioso donde los contornos no se terminan de cerrar del todo. De todas maneras, está a años luz de Allred, aparte de que la sencillez que muestra parece a veces por vagancia y falta de ganas.

Pues bien, estamos ante un tomo bastante recomendable, como viene siendo habitual en esta serie, la cual tiene su desenlace en el siguiente tomo que saque Panini, pues ya fue cancelada en USA hace unos años. Es una pena, porque creo que es una de las mejores que ha habido en Marvel estos últimos años. Irreverente, sorprendente y divertida son las mejores definiciones. 9/10.