Mi nombre es Moisés, llevo más o menos, un par de años en la blogosfera. Comencé en el blog “Los archivos de Typhares” hasta su cierre provisional y, como esto me gustó, monté mi propio blog: “Welcome to the suck”. Siempre he estado visitando este blo, casi desde su creación, y en más de una ocasión me habían ofrecido colaborar (o eso creo) y últimamente me gustó el rumbo que llevaba y pensé que sería una buena oportunidad unirme a él para hablar de Vertigo. Y aquí estoy.
Bueno, empezar en un blog como este, merece algo especial y quiero hablar de la que para mí es la mejor serie de comics que he leído, The Sandman. Yo descubrí la serie por un profesor de guitarra (también amigo) que tuve hace ya tiempo, por aquel entonces yo estaba empezando con los comics, no creo que llevase máas de un año, y todavía no había descubierto mas que X-Men, Spiderman y poco más. Ya poco a poco fui descubriendo más y más y me dijeron que para Sandman no hacia falta leer en orden y que la mejor saga era “La casa de las muñecas” y no pude estar más en desacuerdo. Leí La casa de las muñecas y me gustó, pero viene directamente de la primera saga, que ya compré cuando Norma lo sacó en edición tapa dura maravillosa.
La serie consta de setenta y cinco números. Empezó en 1988 y duró hasta 1996. También hay un especial, “La canción de Orpheo”, donde hablan de la personificación del sueño y aunque tiene una línea argumental que se va determinando poco a poco, sí que tiene muchas historias que pueden leerse sueltas.
En el universo DC a lo largo de su historia ha habido, si no me equivoco, dos Sandmans importantes. El primero es Wesley Dodds, que es un superhéroe (que se creó un año después de Superman, en 1939) que disparaba con una pistola una especie de arena para dormir a sus adversarios. Luego está el Sandman protagonista de la colección de Neil Gaiman, que forma parte de los Eternos, siete hermanos que existen antes de los dioses y seguirán hasta que no quede vida de ningún tipo. Pues bien, la existencia del primero se justifica en la primera historia del segundo, cuando narran que durante la mayor parte del siglo XX, Sueño (Sandman de Gaiman) permaneció encerrado por un hechicero que quiso controlar a la Muerte, obteniendo así la inmortalidad, y fracasó, siendo Sueño el que fue capturado. De esta manera, el sueño de todos los seres fue profundamente perturbado y el reino onírico quedó trastocado. Sobre esta premisa trabaja Gaiman durante la primera saga, en la que el protagonista va poco a poco reestableciendo el orden en su mundo y castigando a sus captores, con apariciones especiales de John Constantine y la Liga de la Justicia.
Nunca me ha gustado demasiado destripar los argumentos de las series, y menos siendo una serie tan buena como ésta, pero creo que debe ser lectura obligatoria y no solo para los comiqueros, sino también para los amantes de la fantasía, terror, mitología, filosofía, etc., ya que Sandman bebe de todos lados, presentando personajes tan variados como Lucifer o William Shakespeare. Hay una historia que a mi me llamo la atención especialmente, trata de una competición entre Sueño y sus hermanas que dando una ambición a un hombre tiene que superar el delirio, el deseo y la desesperación antes de la muerte.
Pues de momento eso es todo, la semana que viene haré una presentación del personaje Muerte para facilitar la lectura del comic, “Muerte: el alto coste de la vida” y un análisis del mismo. Un placer.
Bueno, empezar en un blog como este, merece algo especial y quiero hablar de la que para mí es la mejor serie de comics que he leído, The Sandman. Yo descubrí la serie por un profesor de guitarra (también amigo) que tuve hace ya tiempo, por aquel entonces yo estaba empezando con los comics, no creo que llevase máas de un año, y todavía no había descubierto mas que X-Men, Spiderman y poco más. Ya poco a poco fui descubriendo más y más y me dijeron que para Sandman no hacia falta leer en orden y que la mejor saga era “La casa de las muñecas” y no pude estar más en desacuerdo. Leí La casa de las muñecas y me gustó, pero viene directamente de la primera saga, que ya compré cuando Norma lo sacó en edición tapa dura maravillosa.
La serie consta de setenta y cinco números. Empezó en 1988 y duró hasta 1996. También hay un especial, “La canción de Orpheo”, donde hablan de la personificación del sueño y aunque tiene una línea argumental que se va determinando poco a poco, sí que tiene muchas historias que pueden leerse sueltas.
En el universo DC a lo largo de su historia ha habido, si no me equivoco, dos Sandmans importantes. El primero es Wesley Dodds, que es un superhéroe (que se creó un año después de Superman, en 1939) que disparaba con una pistola una especie de arena para dormir a sus adversarios. Luego está el Sandman protagonista de la colección de Neil Gaiman, que forma parte de los Eternos, siete hermanos que existen antes de los dioses y seguirán hasta que no quede vida de ningún tipo. Pues bien, la existencia del primero se justifica en la primera historia del segundo, cuando narran que durante la mayor parte del siglo XX, Sueño (Sandman de Gaiman) permaneció encerrado por un hechicero que quiso controlar a la Muerte, obteniendo así la inmortalidad, y fracasó, siendo Sueño el que fue capturado. De esta manera, el sueño de todos los seres fue profundamente perturbado y el reino onírico quedó trastocado. Sobre esta premisa trabaja Gaiman durante la primera saga, en la que el protagonista va poco a poco reestableciendo el orden en su mundo y castigando a sus captores, con apariciones especiales de John Constantine y la Liga de la Justicia.
Nunca me ha gustado demasiado destripar los argumentos de las series, y menos siendo una serie tan buena como ésta, pero creo que debe ser lectura obligatoria y no solo para los comiqueros, sino también para los amantes de la fantasía, terror, mitología, filosofía, etc., ya que Sandman bebe de todos lados, presentando personajes tan variados como Lucifer o William Shakespeare. Hay una historia que a mi me llamo la atención especialmente, trata de una competición entre Sueño y sus hermanas que dando una ambición a un hombre tiene que superar el delirio, el deseo y la desesperación antes de la muerte.
Pues de momento eso es todo, la semana que viene haré una presentación del personaje Muerte para facilitar la lectura del comic, “Muerte: el alto coste de la vida” y un análisis del mismo. Un placer.
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