Bendis continúa con la que es la colección que mejor domina dentro del universo Marvel tradicional. Murdock sigue separado de Milla y con sus propios problemas personales, solo la aparición de la Viuda Negra logra ofrecerle un poco de color a su vida, que se le presenta nublada ante sus ojos.
El guionista no deja la trama política conspiratoria de Natasha Romanov, que no sabemos por qué está realmente perseguida y por qué ha vuelto a Matt, pero se concentra más en este número en lo que se refiere al protagonista, el cual no pretende serle infiel a Milla ni tan siquiera habiéndose separado de ella. Lo mejor es que entra en escena un nuevo villano más propio de Punisher que del vigilante de la Cocina, y podemos ver que el abogado ciego no ha perdido el pulso y es, desde luego, todo un hombre sin miedo que a pesar de poseer, en cierto modo, el dominio de Kingpin, no hace lo mismo que éste ni de lejos. De hecho, lo mantiene a salvo de cualquier criminal, como debe ser. Si esto no funciona, siempre puede recurrir al traje del diablo rojo y ponerse a pegar patadas, ahora con la inestimable ayuda de la exespía soviética.
Lo dicho, Bendis sabe tratar de fábula a este personaje y lo demuestra número tras número, la verdad es que da gusto el verlo tan definido, tan seguro de sí mismo. Es toda una proeza. Poco más puedo añadir, pues aunque la saga no se presenta tan lenta como para desesperarse, lo cierto es que se toma su tiempo, pero ofreciendo algo destacable cada número. Como viene siendo habitual en esta colección desde la saga del Juicio del Tigre Blanco, vaya.
Maleev está como siempre, con muy buen nivel, estático pero de estilo propio y no falla nunca en esta colección, lo que garantiza un aspecto gráfico único y adecuado. Su mejor baza se encuentra en las expresiones, en los diálogos, donde los personajes se muestran entre sombras dentro de la oficina de Murdock (en este número, claro). Cada vez tiene un modo más acertado para el uso de las sombras y la versión que nos muestra de Natasha Romanov no está nada mal. Mención especial merece la portada, que es una de las mejores que ha realizado en la serie.
Lo dicho, sigue como siempre, con ese notable alto. Interesante y muy bien escrita. Recomendable. 8/10.
The Pulse #08
Seguimos con la aburrida Secret War... Ahora veamos cuál es el paradero de Jessica Jones, metida en un embrollo bastante peliagudo en cuanto a sus "secuestradores", que resultan ser unos muy bien educados agentes de Hydra, que quieren hacer un trato con ella.
Bendis se mueve con mucha naturalidad en este tipo de diálogos, los impregna de su estilo personal y los realiza con mucha naturalidad, tanta que a veces no cuentan nada en dos o tres páginas. Si eres capaz de aceptarlo, hasta puede gustarte.
Pero el caso es que en este número se sale al respecto, pues logra que resulte interesante y da gusto volver a la Jessica Jones de siempre, que ya empezaba a hartar el verla lloriqueante un número tras otro, por dios, que está embarazada, pero ya parecía la pupas. Aquí, en este número, sin embargo, es la que recordaba en Alias, vacilante y desafiante, así como deslenguada, bien, bien. También tenemos a la media plana del Bugle preguntándose qué hacer con la noticia que pueden tener entre manos, al fin se paran a hablar un poco, que se deciden tarde después de haber despachado a la pobre protagonista en números pasados.
Y al final, ala, un poquito más de misterio del tipo: No podemos decir nada, alto secreto y blablabla... Muy cansino a estas alturas.
Lo que desde luego es de agradecer es la presencia de Michael Lark, que es una maravilla el tio. Después de haber soportado a un Brent Anderson bastante desafortunado en esta serie (tosco como él solo), da gusto ver un estilo como este, muy cercano al de Gaydos en Alias, así vemos a una Jessica que se aproxima mucho a la versión que nos ofrecía éste en la antigua serie MAX. Una narración que ya quisieran muchos, un trazo soberbio y un gusto por el ambiente más que excelente. Me ha parecido un tipo que podría hacer maravillas junto a Bendis en una serie regular de este tipo, qué pena que se quede tan poco tiempo, menos mal que después viene Gaydos, que si no...
Pues eso, sigue esta aburrida saga, que para entenderla hay que leer la miniserie del mismo nombre (crossover, crossover) y que viene dosificada mes a mes sabiendo realmente a poco. De hecho, apenas pasa nada destacable este mes... Aparte de eso, puede que sea el mejor número de Secret War, que no es mucho decir, pero bueno. 6/10.
Los Vengadores #85.
Ufff... Qué final...
Vamos a ver... No tengo ni idea de como empezar porque tengo sentimientos enfrentados y me van a llover muchos palos en cuanto empiece a dar mi opinión, me da que hasta voy a perder mucha credibilidad, pero bueno.
La verdad es que esta saga me ha gustado. Las razones son simples, por fin parece que pasa algo y se van a mover las cosas un poco para los Vengadores, que han estado de capa caída durante mucho tiempo y creo que les hacía falta algo así. Por eso y por varios detalles como la conversación del principio entre Janet y Wanda, la aparición de Extraño (ya era hora un poco de protagonismo para este personaje, por dios), la idea de la Bruja Escarlata enloquecida cual Fénix de la Patrulla-X, esas escenas donde está junto a sus hijos y la amenaza que le lanza al Capi, el que hagan que Magneto se acuerde de que tiene hijos...
¿Lo malo? Que Bendis lo hace muy, pero que muy muy mal. A partir de aquí spoilers:
Lo de Wanda viene muy sin venir a cuento, porque sí y sin ningún desarrollo aparante, ha sido como de un número a otro y las motivaciones no están nada claras. ¿Por qué esos ataques a la mansión? ¿Realmente quiso acabar con los Vengadores para proteger a sus hijos o todo fue sin querer? No tiene mucho sentido, que digamos.
Esa es una, la otra es que Extraño aparece como si tal cosa, justo cuando ya ha pasado todo, ala, ahí lo tenemos, lo sabe todo y reune a toda la pléyade para darles la clase de magia, que alcanza su momento más ridículo cuando dice: La magia del Caos no existe. Coño... ¿y eso que ha estado haciendo el mago durante muchos de los números de su serie regular qué ha sido? Por no hablar de que ese hecho contradice por completo el crossover de JLA/Vengadores, donde la Bruja obtenía más poder en el universo DC porque allí era más intensa la magia del Caos. ¿En qué quedamos? Podría haberla utilizado para explicar por qué puede hacer lo que hace en toda esta saga, porque ni siquiera están claros sus poderes, vamos.
Y lo de Magneto ya es el no-va-más... Aparece de la nada cuando supuestamente estaba muerto (para aquellos despistados, ver el tomo de Excalibur del mes que viene para ver cómo es el retorno) y nadie pregunta. Pero eso no es todo, es que se lleva a Wanda como si tal cosa, como si aquí no hubiera pasado nada. -Nenes, que me la llevo yo, no olvidéis escribir. Y nadie dice ni pio.
Por no hablar de la ausencia de Mercurio...
En fin... Una lástima, son demasiados detalles como para no tenerlos en cuenta. Y eso que me gusta la idea, que no el desarrollo y las incoherencias cometidas por el guionista, que son de juzgado de guardia. Aún así, me atrevería a decir que se deja leer, al menos no aburre ni deja indiferente, en cierto modo (de un modo masoquista... o a lo mejor lo seré yo) se disfruta. De todas maneras, poco recomendable para fans de Vengadores, que verán como su grupo preferido se despeña de la peor de las maneras. Bendis, puedes hacerlo mejor. 4/10.