Hola. Bienvenidos una semana más a +Q Autores. Hoy os hablaré de uno de esos autores que enseguida destacan por encima del resto y que acaban abandonando la industria en busca de pastos más verdes (en esta ocasión verde=dinero) debido a su inmenso talento. Os hablo de Steve Skroce.
De origen croata, Skroce irrumpió con fuerza en el mundo del cómic en 1993 gracias a Marvel (la que ha sido su principal editora) con el cómic Ectokid, con guiones de James Robinson. En esta primeriza obra se podía observar una de las principales virtudes de Skroce: su asombrosa narración y su capacidad para que parezca que los dibujos se van a salir de las viñetas, además de esos rostros tan característicos suyos. También se encargaba de las portadas, pero estas deslucían mucho respecto al interior de la obra debido a la manía de la época de poner brillitos en todas partes. Ectokid pertenecía al sello Razorline, sello que estaba creado conceptualmente por el novelista de terror Clive Barker, ¿Qué? Eran los noventa, la casa de las ideas tenía incluso un sello Marvel Music.
Ya en el 94 empieza a compaginar sus labores en Ectokid, con los lápices de The Strangers, serie escrita por Steve Englehart para la editorial al alza en aquellos días Malibú. Dibuja además una historieta para la antología de DC, Showcase, su único trabajo hasta la fecha para la distinguida competencia. Entonces es cuando llega a los mutantes, sería la franquicia X donde empezaría ser toda una estrella y comenzase a desarrollar esa obsesión por el detalle y la página súper cargada que le caracterizan hoy en día. Empieza ilustrando los guiones de Scott Lobdell para Cable, pero de ahí pasa rápidamente al evento de la temporada “La Era de Apocalipsis” encargándose de lanzar e ilustrar durante sus primeros números la serie de X-Man. En la que estaría hasta el número 20.
Para reconocerle sus muchos méritos, es nombrado dibujante principal de The Amazing Spiderman, no obstante Tom De Falco era escritor y editor en aquella época. Ésta fue una época de coqueteo con Awesome. Y es que hay un dicho en la industria (bueno yo lo leí una vez) y es que si un artista es bueno, alguna vez estará relacionado con Rob Liefeld. Y a Steve Skroce le sobraba la calidad por todos lados. Así que ilustró para Rob, los primeros números de Youngblood con guiones de Alan Moore, y unos cuantos especiales de Awesome Holiday Special y Judgement Day.
Pero en 1998 vuelve triunfal a Marvel dibujando una portada para X-Men y el The Uncanny X-Men 361, que suponía el regreso de Gambito a la Patrulla X tras su abandonó por parte de esta en el polo norte tras su juicio. Hablábamos del cajún, ese mismo año junto a Fabián Nicieza se lanza la serie regular del franchute en la que Skroce está el primer año y en la que crea a los hermanos Gecko. Dos Mercenarios que son clavaditos a los hermanos Wachowski, de los que Skroce es amigo. Como cada X Tiempo en la franquicia mutante toca una renovación. En el año 2000. Skroce es nombrado dibujante y guionista de Lobezno, en la que desarrolla una explosiva saga realmente memorable y violenta con el bueno de Logan masacrando montones de Ninjas, pero sólo duró cuatro episodios, pues el cine llamaba a sus puertas.
De origen croata, Skroce irrumpió con fuerza en el mundo del cómic en 1993 gracias a Marvel (la que ha sido su principal editora) con el cómic Ectokid, con guiones de James Robinson. En esta primeriza obra se podía observar una de las principales virtudes de Skroce: su asombrosa narración y su capacidad para que parezca que los dibujos se van a salir de las viñetas, además de esos rostros tan característicos suyos. También se encargaba de las portadas, pero estas deslucían mucho respecto al interior de la obra debido a la manía de la época de poner brillitos en todas partes. Ectokid pertenecía al sello Razorline, sello que estaba creado conceptualmente por el novelista de terror Clive Barker, ¿Qué? Eran los noventa, la casa de las ideas tenía incluso un sello Marvel Music.
Ya en el 94 empieza a compaginar sus labores en Ectokid, con los lápices de The Strangers, serie escrita por Steve Englehart para la editorial al alza en aquellos días Malibú. Dibuja además una historieta para la antología de DC, Showcase, su único trabajo hasta la fecha para la distinguida competencia. Entonces es cuando llega a los mutantes, sería la franquicia X donde empezaría ser toda una estrella y comenzase a desarrollar esa obsesión por el detalle y la página súper cargada que le caracterizan hoy en día. Empieza ilustrando los guiones de Scott Lobdell para Cable, pero de ahí pasa rápidamente al evento de la temporada “La Era de Apocalipsis” encargándose de lanzar e ilustrar durante sus primeros números la serie de X-Man. En la que estaría hasta el número 20.
Para reconocerle sus muchos méritos, es nombrado dibujante principal de The Amazing Spiderman, no obstante Tom De Falco era escritor y editor en aquella época. Ésta fue una época de coqueteo con Awesome. Y es que hay un dicho en la industria (bueno yo lo leí una vez) y es que si un artista es bueno, alguna vez estará relacionado con Rob Liefeld. Y a Steve Skroce le sobraba la calidad por todos lados. Así que ilustró para Rob, los primeros números de Youngblood con guiones de Alan Moore, y unos cuantos especiales de Awesome Holiday Special y Judgement Day.
Pero en 1998 vuelve triunfal a Marvel dibujando una portada para X-Men y el The Uncanny X-Men 361, que suponía el regreso de Gambito a la Patrulla X tras su abandonó por parte de esta en el polo norte tras su juicio. Hablábamos del cajún, ese mismo año junto a Fabián Nicieza se lanza la serie regular del franchute en la que Skroce está el primer año y en la que crea a los hermanos Gecko. Dos Mercenarios que son clavaditos a los hermanos Wachowski, de los que Skroce es amigo. Como cada X Tiempo en la franquicia mutante toca una renovación. En el año 2000. Skroce es nombrado dibujante y guionista de Lobezno, en la que desarrolla una explosiva saga realmente memorable y violenta con el bueno de Logan masacrando montones de Ninjas, pero sólo duró cuatro episodios, pues el cine llamaba a sus puertas.
Y así fue como con la entrada del nuevo siglo .abandona el mundo del cómic, para trabajar como artista conceptual en las dos secuelas de Matrix, Reloaded y Revolutions, desde luego lo mejor de esos truños son los diseños. Además de con Neo, Skroce también trabajó en la producción de la adaptación de Yo, Robot que en 2004 protagonizase Will Smith. Esto fue su aventura en el mundo del cine, hasta hace poco que regresó para dibujar Doc Frankenstein, serie escrita por los Wachowski para su propia editorial. Burlyman Entertainment.
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