Hola amigos bienvenidos una vez más a El Abogado del Diablo, la sección de +Q Cómics en la que sus diferentes miembros defenderemos a autores y obras que nos gustan a pesar de ser vilipendiados por el público. Esta semana Chuck Austen.
Chuck Austen, su nombre provoca pavor y odio, para mi claro está, este odio no es para tanto y es un autor que me encanta. Se que no soy el único, pero parece que mucha gente teme al que dirán y no defienden sus gustos raros y proclaman a los cuatro vientos el mantra de que el peñazo de Watchmen es la obra suprema, Alan Moore es díos y cualquier cosa escupida por Grant Morrison la octava maravilla, allá ellos, que durante años han pagado por tebeos que al parecer les repugnaba leer... que lástima.
Lo primer que leí de Austen fueron sus números de Electra donde era el dibujante, la verdad es que esta faceta del autor tampoco me acaba de convencer a mi, pero para gustos los colores, luego llegaron dos sensacionales números de Ultimate X-Men con dibujos de Essad Ribic donde Austen presentaría la versión Ultimate de Gambito, como un joven vagabundo que se gana la vida como puede, en una historia llena de ternura donde debe salvar a una niña de Cabeza de Martillo. Luego llegaría Vaughan para acabar de manera tonta con el personaje, eso es otra historia... La obra de Austen que verdaderamente me encanta es The Uncanny X-Men.
Fue en el número 410. Y era la época en la que Joe Casey se hizo con el cargo de manera inexplicable y lo desaprovechó totalmente ya que salvo la saga de X-Corps el resto es bastante olvidable. En New X-Men estaba Grant Morrison haciendo un trabajo que a mi no terminaba de convencer, con personajes grotescos, enemigos siempre más grandes que el anterior y más poderosos (su principal defecto en su etapa de la JLA por cierto) aunque con buenas interpretaciones de algunos personajes como Emma Frost o Cíclope. Así que para mi fue un soplo de aire fresco la llegada de Austen.
Todo el mundo lo crítica pero su etapa en Uncanny X-Men es deudora del espíritu aventurero de la mejor patrulla X de Claremont de los años 80. Además de que introdujo varios conceptos y rescató personajes que todavía perduran, por ejemplo recuperó a Kaos de todo el lío de Mutant X y ahora el bueno de Alex Summers es un personaje capital para Brubaker, fue quien comenzó el camino a la redención de Juggernaut, y a día de hoy sigue siendo un miembro clave de New Excalibur. Austen rompió con la endogamia que llevaba lustros asolando a los mutantes y llevó a un ser humano corriente a la mansión, la enfermera Annie. Si Morrison creó personajes grotescos, Austen nos presentó a Sammy un niño pez maltratado por su padre, personaje entrañable que hizo muy buenas migas con Juggernaut.
¿Qué me decís de “Ella Está con los Ángeles? La historia de Jay Guthrie, Ícaro (otro personaje que luego sería aprovechado). Un relato de amor que como si de una actualización de Romeo y Julieta se tratase da una nueva vuelta de tuerca al drama mutante. Austen llegó por la puerta de atrás y fue respetuoso con el trabajo de los demás, con la continuidad y con la rica historia del grupo. Recuperó el concepto de Krakoa, no se olvidó del asunto de las Mutaciones Secundarias a la primera de cambio y se interesó por personajes que creó su antecesor Joe Casey como Stacy X. Su patrulla X es épica, divertida, bien escrita con diálogos con chispa. Yo personalmente le agradezco mucho que devolviese al primer plano a Arcángel y el Hombre de Hielo, dos miembros fundadores que desde los tiempos de Scott Lobdell y Joe Madureira habían sido ignorados sistemáticamente.
Recuperó Alpha Flight en una historia clásica en la que los dos grupos se veían obligados a enfrentarse, aunque ahí estaba Estrella del Norte en medio de ambos bandos. Un personaje, Jean Paul, que dio mucho juego como en el mítico episodio en que no pudo salvar a un nuevo mutante que descubría que su poder era hacerse explotar a si mismo.
Siempre me he preguntado porque ese odio a este autor, cuyos resultados eran mucho más decentes que algunos de los trabajos más recientes de los grandes cómics-idol Morrison, Ellis, Ennis, Moore o sobretodo Gaiman (putos peñazos sus obras para Marvel). Pero bueno, haya cada cual. Yo me lo he pasado en grande con sus historias y no ha sido hasta la llegada de Brubaker y Carey que he dejado de echarle de menos.
Otros trabajos suyos que para mi son muy destacables son Captain America: Ice. El arco que realizó junto a Jae Lee en la fracasada y aburrida Marvel Knights: CA, esta historia para mi fue la única decente que hizo hincapié en el concepto del hombre fuera de su tiempo. Austen también trabajó para la competencia y ahí está su JLA: El Dolor de los Dioses, donde por una vez la crítica habló bien de él y es que es increíble lo bien que trató a los personajes y sus miedos y motivaciones en una historia donde lo único que ocurre es que cada héroe es incapaz de salvar a un inocente en según que situación. También fue guionista de Superman cuando llegó el relanzamiento de la serie acompañado de Morrison y Rucka. Decir que el único que evitó que me dormiese fue Austen.
Chuck Austen, su nombre provoca pavor y odio, para mi claro está, este odio no es para tanto y es un autor que me encanta. Se que no soy el único, pero parece que mucha gente teme al que dirán y no defienden sus gustos raros y proclaman a los cuatro vientos el mantra de que el peñazo de Watchmen es la obra suprema, Alan Moore es díos y cualquier cosa escupida por Grant Morrison la octava maravilla, allá ellos, que durante años han pagado por tebeos que al parecer les repugnaba leer... que lástima.
Lo primer que leí de Austen fueron sus números de Electra donde era el dibujante, la verdad es que esta faceta del autor tampoco me acaba de convencer a mi, pero para gustos los colores, luego llegaron dos sensacionales números de Ultimate X-Men con dibujos de Essad Ribic donde Austen presentaría la versión Ultimate de Gambito, como un joven vagabundo que se gana la vida como puede, en una historia llena de ternura donde debe salvar a una niña de Cabeza de Martillo. Luego llegaría Vaughan para acabar de manera tonta con el personaje, eso es otra historia... La obra de Austen que verdaderamente me encanta es The Uncanny X-Men.
Fue en el número 410. Y era la época en la que Joe Casey se hizo con el cargo de manera inexplicable y lo desaprovechó totalmente ya que salvo la saga de X-Corps el resto es bastante olvidable. En New X-Men estaba Grant Morrison haciendo un trabajo que a mi no terminaba de convencer, con personajes grotescos, enemigos siempre más grandes que el anterior y más poderosos (su principal defecto en su etapa de la JLA por cierto) aunque con buenas interpretaciones de algunos personajes como Emma Frost o Cíclope. Así que para mi fue un soplo de aire fresco la llegada de Austen.
Todo el mundo lo crítica pero su etapa en Uncanny X-Men es deudora del espíritu aventurero de la mejor patrulla X de Claremont de los años 80. Además de que introdujo varios conceptos y rescató personajes que todavía perduran, por ejemplo recuperó a Kaos de todo el lío de Mutant X y ahora el bueno de Alex Summers es un personaje capital para Brubaker, fue quien comenzó el camino a la redención de Juggernaut, y a día de hoy sigue siendo un miembro clave de New Excalibur. Austen rompió con la endogamia que llevaba lustros asolando a los mutantes y llevó a un ser humano corriente a la mansión, la enfermera Annie. Si Morrison creó personajes grotescos, Austen nos presentó a Sammy un niño pez maltratado por su padre, personaje entrañable que hizo muy buenas migas con Juggernaut.
¿Qué me decís de “Ella Está con los Ángeles? La historia de Jay Guthrie, Ícaro (otro personaje que luego sería aprovechado). Un relato de amor que como si de una actualización de Romeo y Julieta se tratase da una nueva vuelta de tuerca al drama mutante. Austen llegó por la puerta de atrás y fue respetuoso con el trabajo de los demás, con la continuidad y con la rica historia del grupo. Recuperó el concepto de Krakoa, no se olvidó del asunto de las Mutaciones Secundarias a la primera de cambio y se interesó por personajes que creó su antecesor Joe Casey como Stacy X. Su patrulla X es épica, divertida, bien escrita con diálogos con chispa. Yo personalmente le agradezco mucho que devolviese al primer plano a Arcángel y el Hombre de Hielo, dos miembros fundadores que desde los tiempos de Scott Lobdell y Joe Madureira habían sido ignorados sistemáticamente.
Recuperó Alpha Flight en una historia clásica en la que los dos grupos se veían obligados a enfrentarse, aunque ahí estaba Estrella del Norte en medio de ambos bandos. Un personaje, Jean Paul, que dio mucho juego como en el mítico episodio en que no pudo salvar a un nuevo mutante que descubría que su poder era hacerse explotar a si mismo.
Siempre me he preguntado porque ese odio a este autor, cuyos resultados eran mucho más decentes que algunos de los trabajos más recientes de los grandes cómics-idol Morrison, Ellis, Ennis, Moore o sobretodo Gaiman (putos peñazos sus obras para Marvel). Pero bueno, haya cada cual. Yo me lo he pasado en grande con sus historias y no ha sido hasta la llegada de Brubaker y Carey que he dejado de echarle de menos.
Otros trabajos suyos que para mi son muy destacables son Captain America: Ice. El arco que realizó junto a Jae Lee en la fracasada y aburrida Marvel Knights: CA, esta historia para mi fue la única decente que hizo hincapié en el concepto del hombre fuera de su tiempo. Austen también trabajó para la competencia y ahí está su JLA: El Dolor de los Dioses, donde por una vez la crítica habló bien de él y es que es increíble lo bien que trató a los personajes y sus miedos y motivaciones en una historia donde lo único que ocurre es que cada héroe es incapaz de salvar a un inocente en según que situación. También fue guionista de Superman cuando llegó el relanzamiento de la serie acompañado de Morrison y Rucka. Decir que el único que evitó que me dormiese fue Austen.
Por mi podrían traerle de vuelta a Marvel, o sobretodo a DC, que menudos ronquidos me provoca la compañía de Superman y Batman.
No hay comentarios:
Publicar un comentario